|
Escuela de Padres. Metodología Una vez más, habría que analizar qué tipo de EP se busca y, en función de ello, determinar qué tipo de metodología puede ser la más conveniente. Pero, para no insistir otra vez en lo de capítulos anteriores, analizando, una por una, cada tipo de EP, presentamos solamente las líneas básicas de la «metodología activa» que suele darse en una EP participativa. LOS SIETE PRINCIPIOS DE UNA METODOLOGÍA ACTIVA Curiosidad Funciona la curiosidad cuando el grupo comienza a interesarse al menos por uno de estos dos aspectos: el tema y la forma de llevarlo en el grupo. —El «tema» debe caer en el campo de las necesidades de la persona y no proceder tanto de una forma lógica y sistemática, como si fuera un programa lógicamente bien compuesto, pero que no deja iniciativa a los participan-tes: se cometería entonces el error de que las personas están para desarrollar un programa y no al revés, que sería lo importante, que los programas están para desarrollar a las personas. —La «forma» de llevar el tema adelante debe tener consigo un cierto apasionamiento, como cuando se investiga y se va a descubrir algo: es necesario montar el aprendizaje de forma que la gente se vaya implicando y comprobando por si misma qué va pasando, sin darles todo hecho desde el principio. Vida Habría que tener en cuenta dos aspectos: que el tema tenga conexión con la vida de cada cual y que el trabajo realizado dé vida al grupo y se vea cómo crece. No valen, por tanto, temas que no agarran y no se implican en la vida y problemas o anhelos de cada cual: por el contrario, la gente debe percibir que eso le está valiendo para actuaciones inmediatas en su vida familiar. Pero tampoco hay que olvidar que, cuando uno aprende vivencialmente las cosas en grupo, se olvida a veces incluso del tema que están tratando y lo que le queda grabado, sobre todos es la experiencia grupal que está viviendo. Individuo Si se busca una metodología activa de las EP es necesario atender a cada persona tal cual es y se muestra en el grupo; de lo contrario, cuando uno no se siente aceptado como tal, difícilmente admite un cambio personal y, desde luego, no va a colaborar en la construcción del grupo. Si se atiende al individuo, se van a notar dos cosas: —Se le va a tener en cuenta en cualquier decisión: elección de temas, organización, opiniones, manifestación de ideas y sentimientos, sean cuales fueren, las personas notan que se cuenta de verdad con ellas. —Se le va ayudar para que tome decisiones libres, únicas, suyas y no se le va a pretender cambiar desde fuera. Grupo Pero una EP es, desde luego, una escuela participativa y la mejor demostración de que esto es así tendría como consecuencia el nacimiento de un grupo en el que todo el mundo es parte. La «EP participativa» monta su aprendizaje de contenidos y actitudes, buscando información de una forma grupal. Pero, al mismo tiempo, el grupo se constituye en situación vital para la persona, por tanto, no sólo se aprenden contenidos y actitudes: se aprenden un sistema de vivir y comunicarse, independientemente del tema que toque estudiar. Es la vivencia en grupo que luego puede servirles a los padres para que trasfieran ese modo de vivir y actuar a otras situaciones educativas. Creatividad Los padres vienen a la escuela en busca de soluciones para sí mismos y arreglo de cosas que no funcionan; por ello siempre se trata de algo creativo. En primer lugar, porque cada uno ha de construirse su propia solución y no pueden valer teorías que uno no sabe o no quiere aplicarse debidamente; y, segundo, porque, si algo caracteriza al grupo, es la capacidad de buscar soluciones nuevas entre todos y experimentar las cosas desde diversos ángulos de experiencia. Reflexión Una de las características esenciales para que algo se convierta en valor personal es que pase por un proceso de interiorización: nada de lo que la persona va conociendo se convierte en valor hasta que uno lo acepte como tal. De ahí que la metodología activa no consiste solamente en que se hagan muchas cosas en la EP, llevándola a un activismo sin eficacia si no se llega a esa actividad interior de reflexión, por la que libremente acepta el valor. Expresión Una de las mayores garantías de que se está usando una buena metodología activa en las EP es la diversidad y oportunidad que cada uno tiene para comunicar sus ideas, sentimientos y todo tipo de habilidades ante los demás. Por ello, una escuela participativa facilita técnicas y desarrollo de habilidades lo más diversas, de tal forma que cada uno encuentre su mejor modo de comunicarse: desde formas casi magistrales hasta juegos, trabajos manuales canciones, danza, encuesta, discusiones, teatro títeres y actividades en pequeños grupos; lo que importa es que cada uno pueda expresarse a gusto y no sólo unos cuantos porque suelen hablar mejor.
|
|